Re-aprendiendo a vivir

Cuando era adolescente entrando casi a los 20, me imaginaba la posibilidad de que un amplio y variado grupo de especialistas, preparados en diversas disciplinas, me analizaran a profundidad para descubrir lo que yo no había podido descifrar hasta ese momento sobre mí misma.

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Grafólogos, astrólogos, psicólogos, especialistas en lectura de rasgos faciales, terapeutas, psicoterapeutas lacanianos y freudianos, chamanes que leyeran mi aura y mis manos. Vamos alguien que me dijera quién era yo y qué se suponía debía hacer con mi vida.   

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Diez años después he ido descubriendo el camino, no sin ayuda de algunos terapeutas. Al final considero que para mi proceso ellos han sido una guía; su acompañamiento ha sido fundamental para entender mis heridas, pero por muy obvio que parezca, he sido yo misma quien merece la felicitación por haber decidido salir de la zona de confort para aprender a vivir la vida de la manera en que merezco. 

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Me encantaría me acompañaras en este viaje, pero será más gratificante que con mis palabras te sientas impulsad@ a romper tus esquemas y reaprender a vivir. ¡Bienvenidos!